La semana de la familia del Colegio Sagrado Corazón acogió ayer una actividad entre abuelos y nietos con los juegos tradicionales como protagonistas
Hoy en día parece casi misión imposible atraer la atención de nuestros niños y jóvenes, con algo que no sea videojuegos, tablets, ordenadores o móviles. Sin embargo, si estos elementos se ven sustituidos por cariño, juego en grupo, canciones, aire libre y movimiento parece que la cosa funciona. Y así nos lo hicieron ver los abuelos que en la tarde de ayer visitaron el colegio Sagrado Corazón dentro de su semana de la familia, para mostrar a los alumnos algunos de los juegos con los que ellos se divertían.
Los bolos, la gallinita ciega, las chapas, canicas, andar en zancos, saltar a la soga, carreras de sacos, con alguna que otra caída incluida, fueron algunos de los juegos que en la tarde de ayer los alumnos del colegio Sagrado Corazón pudieron conocer y practicar, y a juzgar por sus caras se lo pasaron realmente bien.
Quizás, y aunque tímidamente, algunos de estos juegos se han mantenido a pesar del paso de los años, pero no es el caso de otros como ‘las tabas’, que ya han quedado casi olvidados. Sin embargo, iniciativas como la que en la tarde de ayer se desarrolló permiten a las nuevas generaciones no solo conocerlos, sino también divertirse con ellos.
Parecía como si hubiésemos hecho un viaje en el tiempo retrocediendo unos años atrás. Niños jugando a ‘La rayuela’, saltando a la soga mientras entonaban el conocido ‘Cocherito Leré’ o recorriendo el patio en rudimentarios carros que en su día hicieron las delicias de nuestros mayores y que muchos años después también ha hecho disfrutar a sus nietos. Otros se macaban sus propios retos en ‘el salto de la rana’ o se esforzaban en estirar lo máximo posible la soga para evitar que el equipo rival ganara.
Pero de entre estos divertimentos, el juego del zapatero, fue uno de los que contó con más aceptación por parte de los alumnos.
Tanto les gusto que todos quisieron probarlo, e incluso cuando llegó el momento de volver a las aulas, se resistían a dejar de jugar. Y si los más pequeños lo pasaron bien, qué decir de los abuelos, que vivieron una tarde maravillosa junto a sus nietos, compartiendo aquellos juegos y momentos que marcaron su infancia.
En una tarde casi veraniega el centro se llenó de vida gracias a esta actividad enmarcada en la Semana de la Familia. que ya suma su edición número 29 abriendo las puertas a las familias, que han aumentado su participación, implicación y creatividad.
La semana de la familia continuará esta tarde, partir de las 19:30 horas, con la conferencia “Las redes sociales al servicio del hombre”, y la jornada de clausura mañana viernes 20 de abril. El colofón será el sábado 28 de abril con un día de convivencia en Zaragoza para visitar la Basílica del Pilar y el Parque de atracciones.
De momento, nos quedamos con imágenes de la tarde de ayer, ejemplo de los objetivos de esta Semana de la Familia. Una tarde diferente y especial para la comunidad educativa del colegio Sagrado Corazón. Especial para los abuelos que orgullosos revivieron su infancia y recordaron los juegos con los que se divertían, a través de sus nietos. Jóvenes que, ajenos a su actual realidad, solo pensaban en divertirse con lo más básico, igual que ellos lo hicieron.
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